Los fondos de inversión de acciones locales representan el 25% de los recursos administrados por la industria chilena

La industria de los fondos de inversión en Chile alcanzaron un patrimonio gestionado a finales del 2013 por debajo de los 10.300 millones de dólares. De ese total, el 32% está en fondos que invierten en acciones (tanto locales como extranjeros), seguidos por los fondos de renta fija y los inmobiliarios, que representan más del 20% cada uno. El segmento más pequeño de la industria corresponde a los fondos de inversión de balanceados, que en los dos últimos años han alcanzado los 58 millones de dólares, menos del 1% de la industria.

Los fondos de inversión sobre acciones, aunque continúan liderando la industria como el segmento más grande en términos de patrimonio, registraron una caída del -25,6% en el año 2013. De esta forma pasó de cerca de los 4.494 millones de dólares registrados a finales de 2012, a los 3.342 millones de dólares un año después, indica la Asociación Chilena de Administradoras de Fondos de Inversión (ACAFI). Dentro de este segmento, los fondos de inversión de acciones locales se llevan gran parte de la inversión, con el 80% de los recursos, cuatro veces más que la inversión en los fondos de inversión de acciones extranjeras. Si lo comparamos con el total de los recursos administrados por la industria, el porcentaje que representan los fondos de acciones locales alcanza el 25%.

Por su parte, los fondos de inversión que invierten en renta fija, gestionan un patrimonio de más de 2.600 millones de dólares a finales del año pasado. Recursos que en su mayoría están invertidos en deuda extranjera (85% del total), seguido por los fondos sobre renta fija local (un 13,6%), y los fondos de inversión de renta fija mixta, con un 1,2%.

En cuanto a los fondos de inversión inmobiliarios, administran cerca de los 2.400 millones de dólares a finales de 2013, lo que supone un 6% más que un año antes. Casi el 60% de los recursos están invertidos a través de fondos inmobiliarios relacionados con las rentas, mientras que el resto está repartido entre los fondos de inversión inmobiliario de desarrollo, plusvalía y mixtos. Los penúltimos son los que menos recursos gestionan, con poco más de 110 millones.