La presidenta de autarquia, Maria Helena Santana, declaró la semana pasada que la CVM pretende “ampliar gradualmente la participación” de los fondos brasileños, con un límite del 10% en inversiones en activos extranjeros y de un 20% para los multimercados. La preocupación de la CVM reside en cómo mantener el nivel de seguridad exigido internamente al aumentar su exposición al exterior.
El diario económico Valor destaca que el objetivo de la modernización es que la normas no obstaculicen la competencia entre fondos, garanticen la transparencia y minimicen los conflictos de intereses.
Otra de las reglas que se publicará a final de mes exigirá a los fondos de inversion la divulgación de informaciones básicas a inversores, confirmó Santana. La información la recoge la agencia de noticias Globo que da todos los detalles de la propuesta y de la comparecencia de la presidenta. Con la medida se pretende reforzar la transparencia en las aplicaciones y fomentar la competencia, permitiendo la reducción de tasas de administración practicadas en el mercado, consideradas “altas” por la presidenta. Esto es todavía más importante en el proceso en el que anda inmerso el Banco Central de rebajar el Selic -ahora en el 9,75% anual- lo que reduce la rentabilidad de los fondos pero que, en comparación, convierte en ventajoso el ahorro.