Los cuatro motivos de Joaquín García Huerga (BBVA AM) para tener emergentes en cartera

Chinaparaguas
Express Monorail, Flickr, Creative Commons

“Los activos de países emergentes deben formar parte de un asset allocation equilibrado, deben estar en las carteras sí o sí”. Así de convencido se muestra Joaquín García Huerga, director de Estrategia Global de BBVA Asset Management, en una presentación reciente de la gestora focalizada en estos mercados en desarrollo. La pregunta que más bien un inversor habría de hacerse en estos momentos es: ¿cuánto de emergentes tener? La respuesta dependerá del nivel de riesgo deseado y del horizonte temporal, sobre todo. Pero, para asentar la idea de que los emergentes deben gozar de protagonismo en un reparto de activos idóneo hoy día, García Huerga ofrece cuatro motivos prácticamente incontestables.

Primer motivo: el económico

Su crecimiento potencial a medio y largo plazo, esto es, a diez años, es superior al de los mercados desarrollados. Según las estimaciones de la gestora de BBVA, los países emergentes registrarían crecimientos del PIB anuales del 4,2% de media, frente al 1,5% de los desarrollados. En el corto plazo, en 2018, también marcarían cifras similares: un 4,9% frente a un 2%, respectivamente.

Segundo motivo: menor vulnerabilidad externa

Sus economías acumulan ahora menos vulnerabilidades externas. “Se han vuelto más disciplinados, sus divisas son más estables, tienen menos endeudamiento en dólares, y esto es muy importante porque por aquí les solían venir los problemas, y ahora son capaces de emitir deuda en divisa local porque el mercado confía más en ellos”, asegura el gestor, que hace una mención especial a China.

“China acumula más deuda privada de la que sería deseable, pero también tiene una tasa de ahorro interno muy elevada. Por lo cual, China no debe dinero al resto del mundo, financia internamente ese endeudamiento con su ahorro. Además”, subraya García Huerga, “tiene unas dinámicas internas que no deben pasar desapercibidas”. El país asiático invierte ya el 2% de su PIB en I+D, y eso “va a reequilibrar su economía y a hacerla más sólida en el futuro”.

Tercer motivo: riesgo político contenido

BBVA AM lo ve “más contenido dentro de un umbral razonable y no peligroso”. Aunque con excepciones, las instituciones de los países emergentes han mejorado y las reglas del juego para los inversores internacionales están más claras, opina su director de Estrategia Global.

Cuarto motivo: mayor rentabilidad esperada

Al igual que ocurre con el crecimiento del PIB, sus rentabilidades esperadas son mayores a medio y largo plazo en comparación con las de los desarrollados. En renta fija, se parte de unas rentabilidades estructuralmente superiores y, además, BBVA AM ve a varios bancos centrales de países emergentes con capacidad todavía de bajar más los tipos de interés, porque los tipos reales están altos. En renta variable, las valoraciones de las bolsas emergentes están alineadas con su media histórica, un activo donde los gestores de la firma buscan exposición a factores domésticos: el consumo creciente de las clases medias, la demografía favorable y la mejora del gobierno corporativo de las empresas emergentes.