Lo que debes saber de la industria de wealth management en los principales mercados latinoamericanos

Latinoamérica es una de las regiones de mayor creación de riqueza actualmente, con un importante potencial de crecimiento para la industria de wealth management. Sin embargo, cada país tiene sus propias particularidades.

A nivel regional: una de las tendencias más destacadas en Latinoamérica es que desde la crisis financiera en 2008, los inversionistas latinoamericanos están trasladando su atención de forma progresiva hacia la renta variable, frente al siempre popular deuda a muy corto plazo o money market. Esto lleva a que muchas firmas locales traten de desarrollar una presencia regional que incluye la capacidad de ofrecer oportunidades de inversión en las áreas más atractivas, particularmente en Brasil y la región andina. En términos generales, desde Boston Consulting Group (BCG), indican que "los gestores patrimoniales en Latinoamérica necesitan explorar formas de diferenciar sus propuestas de aquellos jugadores en otros mercados emergentes atractivos".

Chile: su estabilidad y crecimiento económico están impulsando la generación de riqueza. Al igual que otros países como Brasil o México, se trata de un mercado onshore. El segmento de los UHNWI (Ultra High Net Worth Individuals) suponen el 40% de los activos bajo gestión de las familias de altos patrimonios. Para este segmento, las family offices son muy importantes, aunque otros jugadores locales (bancos de inversión, bancos comerciales, gestores, etc) cuentan con una competitiva oferta onshore y algunas, incluso en el extranjero. Asimismo, hay que mencionar un último grupo que ha supuesto un reto para las dos anteriores: las multi-family offices.

"Además, los decepcionantes resultados recientes de la bolsa local combinados con una moneda más débil, representan una llamada a la acción para los jugadores locales. Una proposición buy-side, que incluye la capacidad de proporcionar asesoramiento offshore, así como la oportunidad de invertir en los mercados de alto crecimiento de la región, podría constituir una oferta atractiva para los ricos", explican desde la consultora.

México: Es considerado el segundo mercado más importante y de mayor crecimiento en la región. Su industria onshore está dominada por grandes bancos, seguidos por casas de bolsa y asesores independientes. "Algunas de las firmas más importantes están reequipando sus ofertas mientras que los jugadores más pequeños están generando crecimiento con modelos low-cost o proposiciones de nicho". Asimismo, explican que "el negocio offshore se caracteriza principalmente por relationship managers (RM) que viajan continuamente en busca nuevos clientes, pero que no tienen sede en el país. "Como mucho hay diez operadores offshore, algunos con planes de sacar alguna oferta en la industria local. Además, más de 35 instituciones offshore están actuando como jugadores de nicho, cada uno gestionado entre 1.000 y 3.000 millones de dólares bajo administración".

Brasil: Se trata del principal mercado de wealth management de Latinoamérica, con una industria principalmente onshore. Aunque la mayoría de los gestores internacionales han desarrollado una presencia en el país, firmas locales (la mayoría bancos), son las instituciones predominantes. "A pesar de que el año pasado fue un ejercicio complicado, muchos gestores consiguieron incrementar los recursos gestionados a través de la adquisición de activos. Asimismo, muchos jugadores han progresado a la hora de sanear su grupo de clientes, eliminado a aquellos de menor tamaño que no resultaban rentables", explica los analistas de Boston Consulting Group.

Colombia y Perú: aunque son dos mercados pequeños, se encuentran entre los de mayor crecimiento de la región. Ambos mercados son principalmente offshore, a diferencia de los anteriores, aunque también se está desarrollando una interesante oferta local. En Perú, "jugadores locales bien posicionados y sofisticados también representan una parte importante de los activos offshore". En el caso de Colombia, destacan que los reciente cambios tributarios generará algunos retos para la industria offshore, y " es probable que suponga un impulso para una mercado onshore aún más significativo".