“Las primeras batallas de lo que podría ser una guerra de comisiones, suceden en el sector de la inversión pasiva”

Los ETF no tendrán más remedio que reducir sus comisiones si quieren seguir siendo competitivos. Es la principal conclusión de un estudio reciente de la consultora Morningstar, en el que se hizo el ejercicio de comparar los costes de invertir en fondos cotizados y trackers tradicionales, informa Funds People.

Tal y como explica José García-Zarate, analista de ETF para Morningstar, dicho estudio apunta que “el ratio de gastos totales (TER) de los ETF de renta variable ha disminuido de forma progresiva desde 2008”, debido a “la llegada de productos cada vez más baratos en relación a los ETF de más largo recorrido en el mercado”. García-Zárate explica que, teniendo en cuenta que una de las claves del éxito de estos productos es su estructura de precios única, sin distinciones entre inversores minoristas e institucionales, “la industria de fondos de gestión activa no tendrá más opción que también reducir costes con el fin de seguir siendo competitiva”.

Este entorno, en el que de hecho ya se ha observado una reducción de los costes por la fuerte competencia entre proveedores de ETF por cuota de mercado, lleva al analista a ir más lejos al afirmar que “las primeras batallas de lo que en un futuro podría transformarse en una guerra de comisiones en Europa, se están llevando a cabo en el sector de la inversión pasiva”.

Volviendo a los resultados del estudio, desde Morningstar observan que los proveedores de trackers tradicionales han optado por reducir comisiones para frenar la pérdida de cuota frente a los ETF, una tendencia que se ha percibido especialmente en Reino Unido. Con todo, el mismo estudio observa que pese a las rebajas que ha sufrido el TER –del 0,96% al 0,85% para minoristas y del 0% al 0,37% para institucionales- “un gran número de proveedores de trackers tradicionales siguen cobrando tarifas muy altas, particularmente a clientes minoristas”, en palabras de José García-Zarate, que explica que alrededor del 40% de los trackers tradicionales de renta variable grandes capitalizadas europeas cargan TER de más de un 1% a clientes minoristas.

Niveles de comisiones injustificados

El analista asevera que “claramente, estos niveles de comisión son totalmente injustificables en relación a lo que estos productos ofrecen”. “Es más, se puede decir sin temor a exagerar, que en algunos países europeos –incluido España – algunos proveedores de trackers tradicionales explotan a sus clientes minoristas” afirma, concluyente. 

Resultados distintos son los que arroja el estudio sobre las comisiones aplicadas a productos de renta fija, en los que se observa que el TER de los ETF se ha ido incrementando de media desde 2008. “A primera vista, estos resultados contradicen la tendencia observada en los ETF de renta variable. Sin embargo, esta aparente contradicción no lo es tanto cuando se pone en el contexto de las diferentes velocidades en las que los segmentos de renta fija y variable del mercado de ETF se han desarrollado en Europa”, explica el experto, que señala que este tipo de productos se ha incorporado más tarde al mercado y actualmente suponen un 20% del patrimonio total, frente al 65% de los de renta variable.

Todo esto le lleva a afirmar que, en este caso concreto, la subida de los TER de los fondos cotizados de renta fija “refleja la evolución en la sofisticación de la oferta de productos”, aunque puntualiza que, “si la tendencia observada en el segmento de renta variable se toma como modelo, se podría esperar competencia en costes también para el segmento de renta fija en un futuro”.

García-Zárate concluye su análisis apuntando que las presiones sobre los costes observadas en los TER “podrían extenderse a otras áreas de la cadena de valor”, llegando eventualmente a los fondos de gestión activa “para beneficio de todos los inversores en fondos”.