La bolsa alemana y los mercados de high yield e investment grade, principales apuestas de DWS

Según sus previsiones, recogidas por Funds People, las divergencias entre las economías se mantendrán a lo largo de los próximos doce meses por lo que, en un proceso de asignación de activos, convendría primar los países que muestren un ritmo de crecimiento más sólido. Por valoraciones, el experto antepone la Bolsa europea a la de Estados Unidos, sobre todo en lo que representa el Dax de Frankfurt, índice donde encuentra las oportunidades de inversión más interesantes.

En este sentido, su interés por la renta variable alemana se fundamenta en unos ratios de valoración que, a su juicio, “no sólo son atractivos frente a otras bolsas, sino que están en niveles muy próximos a sus mínimos históricos”. De hecho, por fundamentales el Dax está otra vez en su señal de compra, con un ratio precio-valor en libros cercano a uno. “Siempre que esto ha ocurrido en el pasado, el índice ha experimentado un rally alcista”, asegura.

En lo que respecta a la bolsa europea en su conjunto, Dañobeitia afirma que, pese a que la ralentización que experimentará la economía europea podría derivar incluso en una suave recesión, “las valoraciones actuales son muy bajas y las posibles reducciones de beneficios ya están en precio”. No obstante, este experto encuentra conveniente aprovechar las correcciones del mercado para tomar posiciones, sobre todo en aquellas compañías exportadoras que se puedan beneficiar del crecimiento de los países emergentes.

En lo que respecta a las emisiones de deuda pública, el experto se muestra convencido de que “con el alto volumen de emisiones que se tiene que renovar durante el 2012, pensamos que los tipos de interés requeridos por los inversores (en la deuda periférica) serán altos", lo que de alguna forma limitará en parte un permanente estrechamiento de los diferenciales, afirma. "Además, con la volatilidad esperada en este activo, habrá oportunidades a lo largo del año", afirma el experto.

En este punto, Dañobeitia califica de “chocante” el hecho de que, por ejemplo, la rentabilidad del bono italiano a cinco años sea casi un punto mayor que la que ofrece el marroquí o que Portugal tenga que pagar un interés del 16% para colocar su deuda a cinco años cuando Egipto, país que lleva casi un año inmerso en medio de un caos social y político, lo hace a un tipo menor (15%).

También en el mercado de deuda corporativa existen oportunidades muy interesantes que se deberían tener en cuenta, más aún teniendo en cuenta que “los precios tanto en investment grade como en high yield cotizan a niveles históricamente atractivos”. Lo demuestra, a su juicio, los niveles de "default implícitos" actuales con respecto a los peores ratios de impagos en periodos históricos de cinco años.

Menos entusiasta es la visión del director general de DWS Investments para Iberia y Latinoamérica respecto a activos considerados tradicionalmente seguros, como el bono alemán a 10 años o el oro, con los que, en su opinión, “conviene ser cautos ya que podrían convertirse en una trampa para el inversor”.