Juan Pablo Valdés, el último en incorporarse al equipo de la intermediaria de Grupo Sura

Antes de incorporarse al Grupo Sura en mayo, Juan Pablo Valdés trabajó como gerente de clientes privados de Celfin Capital durante poco menos de 4 años. También ha estado como gerente de mercado internacional en Tanner Corredores de Bolsa, y en Banchile Corredores de Bolsa como broker wealth management. Se graduó en la Universidad de los Andes en 1999, y tiene un master en gestión por la Macquire Graduate School of Management.

Por su parte, Daniel Rojas se incorporó a Sura como sub-gerente de operacionesen febrero de este año. Anteriormente, desempeñó el mismo trabajo en Bice Inversiones y Celfin Capital. Asimismo, ejerció como subgerente de control financiero en el Banco Penta, y en el 2000 trabajó como analista de control y gestión de inversiones en Zurich Financial Services.

Por su parte, Pablo Matte se incorporó a sURA chile como sub-gerente de inversiones en abril de este año. Anteriormente ejerció como operador de renta variable para la intermediaria del BBVA en Chile, y como operador de renta variable para clientes institucionales para el Banco Bice. Tambie´n trabajó para EuroAmerica y en Itaú Chile Corredora de Bolsa. Se graduó como ingeniero comercial por la Universidad de Chile en el 2004.

Con la vista en el segundo semestre

La intermediaria, que se espera empiece a operar a principios del segundo semestre, comenzará ofreciendo sólo transacciones de renta variable. Sin embargo, desde Grupo Sura consideran que en un año plazo estaría operando todos los instrumentos de inversión.

Aunque Andrés Errázuriz, vicepresidente de Wealth Management de Sura Chile no detalla cuáles son sus metas de participación de mercado, plantea que la corredora permitirá transar a cerca de 10 mil actuales clientes de Sura que están interesados en invertir directamente en bolsa. La corredora de bolsa estará enfocada en su totalidad en clientes personas naturales o retail. "Queremos masificar el acceso al ahorro a través de inversiones en acciones", señala. Y agrega: "En Chile queda mucho potencial en transacciones por PIB de los países. Más allá de la coyuntura de las utilidades de las compañías, las acciones como instrumento de inversión deben doblar o triplicar su volumen transado si queremos llegar a estándares de países desarrollados".