"Hay un poco de exageración en la reacción actual con respecto a la percepción de riesgo de Brasil"

Las dudas sobre el futuro de Brasil y los mercados emergentes continúan. De hecho, la semana pasada Standard & Poor's rebajaba la calificación crediticia de la deuda brasileña a tan sólo un paso del bono basura, mientras que la salida de capital de los emergentes continúa. Aún así, Joaquin Levy considera que parte de estas reacciones son desproporcionadas.

"La venta de activos de los mercados emergentes refleja la evolución de la economía mundial, que está dejando atrás la crisis del 2008", y donde el cambio de rumbo de la Fed en Estados Unidos, aunque previsible, genera cierta volatilidad y preocupación. Así, Levy indica que parte de las dificultades que han experimentado en los últimos meses los emergentes se debe a que muchos "inversionistas de países desarrollados deshicieron posiciones en estos mercados en un momento de incertidumbre". Por tanto, los países emergentes más grandes como Brasil, Sudáfrica, Turquía y la India se vieron afectados. "Lo importante es que están respondiendo, en diferentes escalas, al nuevo entorno económico a través de ajustes en la política monetaria y la perspectiva fiscal", apunta.

En el caso particular de Brasil, Joaquim Levy considera que "hay un poco de exageración en la reacción actual con respecto a la percepción de riesgo del país. Brasil sigue mostrando sólidos fundamentos macroeconómicos, reflejados en los superávit fiscales, el bajo desempleo, apoyo a los ingresos y e importantes reservas internacionales", explica. Asimismo, señala que "sigue presentando buenas oportunidades de inversión tanto en el mercado de valores como en el de renta fija".

"Por supuesto, después de la creación de casi 15 millones de empleos en los últimos años, y el desempleo en mínimos históricos, la economía pasa por un período de reajuste, tras un exitoso período de crecimiento basado en el consumo. En este nuevo entorno, la prioridad es la inversión pública y privada, especialmente en infraestructura y logística. Durante los próximos dos años, estos y otros sectores, que proporcionan mecanismos a la economía para lograr aumentos de la productividad y ahorro de costes, las empresas tienen un mercado creciente en Brasil", explica.