Fitch mantiene la calificación de México en BBB

Fitch Ratings mantiene la calificación soberana de BBB para México. La agencia considera sólido al entorno de estabilidad macroeconómica del país, así como a su sector bancario, al cual también calificó como estable en su reporte de perspectivas publicado la semana pasada. 

Esta estabilidad, apunta la agencia crediticia en un comunicado, aunada a los bajos desequilibrios externos, y un nivel moderado de endeudamiento externo soportan la decisión de la agencia de mantener la calificación de México y otorgarle perspectiva estable.

Shelly Shetty, líder del grupo de Soberanos para América Latina en Fitch afirma que "las disciplinadas políticas económicas de México, una mejoría en la posición de liquidez además de modestos desequilibrios fiscales y externos colocan al país en una buena posición para soportar la volatilidad del entorno financiero internacional.”

Según Fitch, la capacidad de recuperación ante el contexto externo estará sustentada por la ampliación de la Línea de Crédito Flexible otorgada recientemente por el Fondo Monetario Internacional (FMI), así como los niveles de Reservas mejorados, los cuales han superado niveles de antes de la crisis.

Para la calificadora, desde 2009 la economía del país se ha encaminado con pasos sólidos hacia la recuperación de la crisis financiera, pasos que han sido impulsados principalmente por la recuperación en demanda local y unas mejores políticas de comercio exterior.

Sin embargo, la agencia subraya que un deterioro de la situación en la Eurozona o en Estados Unidos podrían afectar la calificación de México en un futuro.

Ante las próximas elecciones presidenciales mexicanas, que se celebrarán en julio, Fitch espera que el trayecto macroeconómico del país continúe por las mismas líneas, aunque se pregunta si la nueva administración será capaz de agilizar los procesos para una mejora económica.

De acuerdo con Fitch, un cambio en la calificación de México puede verse limitado por una debilidad estructural en las finanzas públicas y un crecimiento moderado en su desempeño y perspectivas futuras, además de señalar la necesidad de implementar reformas estructurales y reducir los niveles de violencia, mencionando que a pesar de la recuperación vivida en los últimos dos años, los niveles del Producto Interno Bruto vistos por el país latinoamericano han sido de únicamente el 1,5% y 2,2% a cinco y diez años, respectivamente.