Errores

Hace poco estuve hablando con un amigo que, aun no siendo aún argonauta, comparte la misma filosofía y le gusta aprender. Colgaba en su Facebook un comentario lamentando no haber comprado Tesla el año pasado, sobre todo teniendo en cuenta todo lo que había subido desde entonces. Le dije casi textualmente, que el error hubiera sido invertir en una empresa que- en palabras de Buffett- se encuentra fuera de tu círculo de competencia,…pese a que después suba en bolsa.

En muchas ocasiones es bastante normal encontrarnos con inversores que lamentan no haber comprado algo porque ha subido o no haber vendido algo porque ha caído. Quizás este artículo pueda lanzar algo de la luz o de la visión que desde el value se tiene sobre el tema.

A mediados de Mayo de 2012 escribí un artículo para La Crónica de León titulado “Y el Cielo se desploma sobre nuestras cabezas” (vale, lo reconozco, quizás fue un título algo largo-¡¡ pero menos que “El inglés que subió una colina pero bajó una montaña!!) y comentaba básicamente cómo aquellos inversores que estaban vendiendo Gamesa en precios entre 1.8-2 euros estaban entregando a precios irrisorios una empresa que razonablemente valía bastante más. Posteriormente esas acciones bajaron hasta cotizar a un euro, con lo cual supongo que alguno de los lectores diría que menudo consejo pésimo el recomendar mantenerlas o comprar a esos niveles entorno a los dos euros,…una caída del 50% en pocos meses.

En Mayo de este año escribí otro artículo en el que hacía un repaso de lo que había sucedido. En ese momento la cotización de Gamesa estaba en 2.96 euros, por lo que el que hubiera mantenido o comprado a precios de dos euros en el primer artículo, estaba obteniendo una ganancia muy, muy razonable para doce meses. Evidentemente, lo ideal – y que el value recomendaría- habría sido incrementar la posición a precios inferiores, pero olvidémonos de esto. Actualmente la cotización, obviamente es muy superior, por lo que, con suerte algún lector inicial estará encantado de aquél primer artículo. Como explicaba en los diferentes artículos, el objetivo no era demostrar lo listo que soy o lo bien que funciona el value en el corto plazo. No, ni mucho menos. En primer lugar porque no soy tan listo y en segundo lugar, porque el value no promete rentabilidades en plazos de doce meses (o quince si nos ponemos a ello).

Sin embargo, y esto es lo que tiene anclaje con el asunto de los errores, en el artículo inicial comentaba que pese a que pensaba que Gamesa, a esos precios, estaba fuertemente infravalorada yo no la quería incluir en el Argos Capital. No se trata, en mi humilde modo de ver, de comprar TODO lo que esté barato; creo que es importante ser selectivo y elegir en qué empresas poner nuestro dinero (o en el caso del fondo, vuestro dinero). Y en el caso de Gamesa no me interesaba comprarla pese a que estaba cotizando con suficiente margen de seguridad.

¿Fue un error? (¡Callad, bellacos, no digáis tan pronto: siiiiii!- malandrines) Seguramente muchos pensarán que sí, sobre todo viendo la evolución posterior de la cotización,…aunque posiblemente los mismos que ahora dicen que fue un error no comprarla pensaran que fue un acierto no comprarla cuando cayó a un euro.  Pero esa sería una conclusión tomada a posteriori y poniendo el foco únicamente en la evolución a corto plazo del precio de la empresa que, otros, están dispuestos a ofrecer por esas acciones. Y eso es trampa, la decisión ha de tomarse en un momento con vistas al futuro,…y aunque podamos calcular que el valor de Gamesa podría rondar los 5-6 euros, no sabemos a ciencia cierta cuándo- si ocurre- el mercado nos dará la razón. No hay forma de saberlo.

Mi motivo para no quererla en la cartera del Argos era, entre otras cosas, que la empresa tenía más deuda de la que me apetecía, no era especialmente rentable comparada con otras alternativas que podía encontrar (mejores empresas o iguales pero aún más atractivas por precio o nivel de endeudamiento) y no tenía ninguna ventaja competitiva sostenible.

¿Estaba barata? Sí, por supuesto. ¿Había que comprarla? No, o al menos no necesariamente. ¿De haberlo hecho habríamos ganado mucho dinero en doce meses? Sí,…pero ésto sólo lo sabemos con certeza ahora, …si hubiera habido más problemas- deuda oculta, por ejemplo- habríamos invertido el dinero de los argonautas en una compañía de la que, ya en un principio, no me ofrecía mejores cosas que otras alternativas.

Hay una estrategia en la que sí habría tenido opción Gamesa a incluirla. Algo que llaman el quantitative value que básicamente se centra en comprar de forma más o menos periódica todas las empresas que, según unos determinados parámetros, aparecen en nuestros filtros como muy baratas. Y cada doce meses, se venden tanto si han ganado como si han perdido. En este tipo de estrategia, lo adecuado es tener una cartera amplia, para que las que salen bien, compensen de sobra a las que quiebran. Y en este caso no hay que “comprender y conocer” la empresa. Puede funcionar bien,…pero personalmente me encuentro más cómodo sabiendo dónde pongo el dinero de los argonautas y no simplemente dejándome guiar por una señal de ordenador.

En el caso de Tesla de mi amigo o de Gamesa, el problema no es que suba o baje el precio de la acción en cuestión. Está en saber que entra en nuestro círculo de competencia y que cumple nuestros parámetros,…aunque empiece cayendo su precio en bolsa.

Un abrazo a todos y hasta el próximo artículo.