"Época de migraciones"

BLOG de Enrique Serra. El mapa presente de integración de entidades financieras en España ha provocado un nivel de concentración de entidades del que se desprenden múltiples consecuencias.

Quizás todos tengamos en mente las más inmediatas derivadas de la enorme saturación, todavía a día de hoy existente, en cuanto al número de oficinas, y por tanto también en cuanto al número de empleados. No es este el caso de análisis de hoy. Como ya sabéis los que habéis leído mis blogs anteriores, el blog B.O.W (Back-office World) busca siempre el enfoque de la trastienda de la industria de las IICs y este nuevo capítulo no podía ser menos.

Un gran número de esas entidades integradas tenían sus propias “fábricas de IICs” que distribuían a través de su red de oficinas, la cual iba creciendo año tras año. Producto de fabricación propio, asociado a mi marca, distribuido por mi red…. Todo queda en casa. O dicho de otra manera, si me permitís aplicar el lenguaje del blog (os remito a los dos primeros capítulos para aquellos que os enganchéis ahora al blog), la vaca era de la entidad, se ordeñaba en la entidad, se envasaba dentro de la casa y se distribuía por la red de tiendas del grupo.

En esta inédita concentración de “fábricas-envasadoras-tiendas” de IICs a la que estamos asistiendo, se ha estado produciendo un hecho que tiene su importancia y del que se ha hablado poco. La Migración de IICs de una gestora a otra provocada por las integraciones y compras de entidades.

El proceso es más delicado de lo que parece ya que las gestoras cuentan con aplicaciones propias o de proveedores terceros y cada una con una parametrización determinada de los principales aspectos que conforman un NAV o Valor Liquidativo.

Se ha producido, y se está produciendo, cambios de envase del producto que deben ser tratados con la mayor prudencia y diligencia para evitar que el mismo pierda sus cualidades desde el “envase” origen al “envase” destino.

Sabéis que soy de la opinión de que si hiciéramos la prueba de replicar exactamente una misma IIC en “n” gestoras diferentes, obtendríamos “n” valores liquidativos resultantes y distintos entre sí. Criterios de valoración, criterios de contabilización de operaciones, de devengo de comisiones etc etc… conforman “envases” con unas cualidades únicas en cada gestora y a este hecho hay que añadirle la necesidad de cuadrar la información de origen en la aplicación de destino, los llamados ajustes de migración.

Todo lo que se salga de la rutina en el trabajo de un backoffice de IICs supone riesgo operativo. Las migraciones son trabajos importantes, que tienen poco reconocida su importancia, duros, complejos y peligrosos si se hacen mal. Desde aquí mi reconocimiento y apoyo a quienes las estén sufriendo ahora. Backoffice, depositarios, proveedores de aplicaciones, reguladores y auditores tienen que vigilar bien estos procesos. Buen viaje.