¿En qué consiste un compartimento de propósito especial?

DavidJGB
DavidJGB, flickr, creative commons

El side pocket (compartimento de propósito especial) está de actualidad. Recientemente, a causa de la intervención de Banco Madrid por parte del Banco de España, también se procedió a hacer lo propio por parte de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) con la gestora del grupo. Una decisión que provocó la suspensión temporal de los reembolsos de todos los fondos gestionados por Banco Madrid Gestión de Activos, salvo aquellos que estaban depositados en Cecabank.

Estos últimos eran todos los vehículos que, desde la gestora de Banco Madrid, se gestionaban para las redes bancarias de Liberbank y BMN. Sin embargo, dentro de este grupo, había dos de ellos que no corrieron la misma suerte ya que, parte de su cartera estaba invertida en depósitos de la entidad, afectados por el proceso de concurso de acreedores con carácter voluntario en el que está inmerso el banco.

Se trata del BMN RF Corporativa y el BMN Fondepósito, para los que se habilitó un compartimento de propósito especial a finales de la semana pasada, el día 27 de marzo. Pero, ¿en qué consiste este mecanismo?

Desde el día 17 de marzo, fecha en la que la CNMV decide paralizar la operativa de estos fondos, todas las partes implicadas (CNMV, Banco Madrid como gestora, BMN como distribuidor y Ahorro Corporación como proveedor de la plataforma tecnológica empleada por Banco Madrid para la administración de los partícipes de los fondos procedentes de BMN Gestión) estuvieron analizando las distintas alternativas para salvaguardar el interés de todos los partícipes.

Finalmente, diseñaron la creación de un side pocket que consiste en dividir el vehículo original en dos, separando la parte liquida de la ilíquida. En este caso, el fondo original BMN RF Corporativa mantiene un 95,71% del patrimonio y el fondo original BMN Fondepósito un 85,76%. Y así, se habilita un compartimento especial para la parte ilíquida, que supone el 4,29% y el 14,24% del patrimonio total, respectivamente.

La particularidad del side pocket es que, aunque se creen dos compartimentos, el número de participaciones de uno y otro siguen siendo las mismas. Es decir, utilizando al BMN RF Corporativa a modo de ejemplo, si este vehículo tenía más de seis millones de participaciones antes de paralizarse su operativa, ahora tanto el vehículo original como el side pocket tendrán más de seis millones de participaciones cada uno, pero con un valor liquidativo equivalente en porcentaje al patrimonio que representan cada uno de ellos.

Para mantener la fiscalidad, se reparten los costes de las partidas proporcionalmente entre el compartimento original y el compartimento de propósito especial de nueva creación.  

Según ha podido saber Funds People, en ambos casos la gestora ha calculado el valor liquidativo a día 27 de marzo, de tal manera que, el día 30 de marzo los participes ya podían ordenar suscripciones o reembolsos, así como traspasos sobre el compartimento no afectado por los activos ilíquidos, y por otro lado, se procedió a dar salida a todas las órdenes pendientes de ejecutar desde la suspensión de operativa.

Al mismo tiempo que se reanuda la operativa del fondo original, el side pocket se queda paralizado hasta que se resuelva qué ocurre con el procedimiento concursal y liquidación de la entidad. Según se manifestaba en el hecho relevante, la intención de BMN es poder comprar aquellas participaciones de los compartimentos especiales que solicitaran sus clientes, con el fin de dotar de liquidez total a los partícipes.

En caso de que esto ocurra finalmente, al quedarse BMN como único partícipe de este producto, asumiría el riesgo asociado a la resolución del procedimiento concursal relativo al patrimonio invertido en depósitos, de un 4,29% en el BMN RF Corporativa y de un 14,24% en el BMN Fondepósito.