Credit Suisse Gestión: “Estamos neutrales tácticamente y sobreponderados estratégicamente en renta variable”

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Rogbu, Flickr, Creative Commons

En un desayuno organizado por Credit Suisse Gestión, Gabriel Ximenéz de Embún, responsable de estrategia e inversión de la firma, apuntó que para incrementar su peso en renta variable, cree que es mejor esperar a una corrección, la cual no cree que irá más allá del 10%. “Una rebaja entre el 5% y el 10% sobre los niveles actuales sería un buen momento de entrada”, comenta Ximénez de Embún, que indica como esta bajada, en una cartera de 50% en renta fija y otro 50% en renta variable, haría incrementar a un nivel del 60-70% la exposición correspondiente a esta última.

Esta es la conclusión general de su posicionamiento en renta variable: neutral en su visión táctica  -por debajo del plazo de los seis meses- y sobreponderados estratégicamente. En este aspecto, los argumentos que defienden estas perspectivas son la aceleración del crecimiento global y la abundante liquidez existente. Según indican, “esperamos revisiones al alza en las previsiones de crecimiento de los beneficios empresariales, en línea con el crecimiento del PIB global”. Además, el exceso de liquidez en la OCDE, aunque se haya desacelerado ligeramente, sigue siendo consistente con una subida del 10-15% de la renta variable global.

No se olvidan tampoco de otro factor positivo para la renta variable y es que la “gran rotación hacia la renta variable” ya está en marcha lo que ayudará a suavizar las posibles correcciones del mercado.

Europa frente a EE. UU., sin olvidarse de los emergentes

Pero, ¿qué mercado favorecen?. Desde Credit Suisse Gestión lo tienen claro, Europa frente a EE. UU. De este último, señalan que hay que prestar mucha atención a las valoraciones, porque claramente respecto a la media histórica está cara, mientras que contra el bono a 10 años, aunque la bolsa americana parece barata, destacan que esto no es así, ya que hay que tener en cuenta la “burbuja” del bono americano.

Tampoco apoya el hecho de que “los márgenes empresariales están en máximos históricos”, así como “la retirada de estímulos por parte de la Fed”, que limita el recorrido del S&P500. "En nuestra opinión la capacidad de revalorización es mucho más limitada en EE. UU. que en Europa”, apuntó Ximénez de Embún. Por tanto, tras años de “underperformance”, el 2014 podría ser el año de Europa.

En esta región destacan que los márgenes están muy bajos y como el momentum macro podría impulsar la recuperación de los beneficios, junto a que las valoraciones están atractivas, en concreto, “las periféricas”. “La reducción de la prima de riesgo podría dar oportunidades en algunos valores”, apunta Ximénez de Embún.

En cuanto a los más denostados, los emergentes, con valoraciones en cerca de mínimos, advierten que no son todos iguales. Credit Suisse Gestión se decanta por aquellos países con superávit por cuenta corriente: Asia y, en concreto, Corea del Sur, es el favorito para la firma. 

En la inversión sectorial, Ximénez de Embún quiso indicar las atractivas valoraciones del sector tecnológico así como el de telecomunicaciones, área en la que “el nuevo entorno regulatorio propicia las operaciones corporativas en un sector que ha sufrido mucho a lo largo de los últimos años”. Por otro lado, en cuanto a la bolsa española, también ven potencial en el sector industrial y de utilities. En referencia a este último, piensan que, “aunque ahora nadie lo quiere, tiene un componente cíclico que, si mejora la economía, es seguro que aumentará la demanda de electricidad”, apunta Javier Alonso, director general de Credit Suisse Gestión.

Renta fija

En renta fija, con tipos históricamente bajos y en subida, los diferenciales estrechándose, y ante posibles retornos negativos del bono alemán, americano y japonés, ¿qué opciones quedan? Según Gregorio Oyaga, responsable de renta fija, podría ser el momento para la consolidación de un activo como son los híbridos corporativos.

En concreto, en el sector financiero ante los cambios regulatorios de Basilea III y Solvencia II y su impacto en la estructura de capital, sugieren una estrategia en la que optarían por la deuda subordinada frente a la deuda senior y también por “un producto que goza de una protección amplia en el marco regulatorio español”, las cédulas hipotecarias. Una apuesta también interesante para Oyaga, serían los bonos de multinacionales emergentes investment grade en dólares, los cuales “se han visto perjudicados por el domicilio en el que radican”. Algo similar a lo que habría ocurrido a algunas compañías españolas en el pasado.

No obstante la situación ha cambiado y “las curvas de España y Alemania previsiblemente se seguirán estrechando en un entorno de tipos al alza y la rentabilidad del bono español a diez años”, del que Oyaga piensa que ha tocado fondo, “podría tender al alza apoyado por una subida mayor del alemán”.