¿Cómo está preparando Cyril Freu la cartera del DNCA Invest Miuri de cara a las elecciones francesas?

Cyril Freu (DNCA)
Foto cedida

Cyril Freu, gestor de DNCA (parte de Natixis Global AM), dedica una gran parte de su trabajo a “anticipar escenarios y buscar una buena solución para cada uno de los escenarios que van surgiendo”. Un buen ejemplo es cómo está preparando al DNCA Invest Miuri para abordar las elecciones francesas.

“Creo que la probabilidad de ver a Le Pen elegida como presidenta es inferior al 10%”, afirma el gestor. Ve posible que la líder del Frente Nacional obtuviera un 30% en la primera vuelta, pero no cree que obtenga más del 20% en la segunda vuelta. Es decir, que en su escenario central “hay un 80% de probabilidades de que haya candidatos democráticos, republicanos y pro europeos en la segunda vuelta”.

No obstante, el gestor también está teniendo en cuenta “otro 20% de probabilidades de que Benoît Hamon, que representa a la parte más izquierdista de los socialistas, se las apañe para convencer al resto de partidos de izquierdas de Francia de ir en coalición y así llegar a la segunda vuelta contra Le Pen”. Freu considera que esta opción sería “un poco populista” (una de las propuestas estrella de Hamon es el pago de una renta básica universal de 750 euros), pero no antieuropea.

Freu descarta una gran alteración de la renta variable en caso de victoria de Fillon, Macron o incluso Hamon, pero sí le preocupa –aunque insista en que sus probabilidades son mínimas- que gane Le Pen, por considerarla “un riesgo sistémico para el mercado”. En medio de estas probabilidades, el gestor observa que muchos inversores que han salido escaldados del Brexit y las elecciones estadounidenses están siendo muy pesimistas en sus previsiones con los comicios franceses. Así, espera que se mantenga la volatilidad hasta los comicios, y avanza que “puede que genere algunas oportunidades en el mercado francés”.

Aquí entra en juego el sólido proceso de inversión del DNCA Invest Miuri, doblemente calificado como Blockbuster y Consistentes Funds People. El fondo combina posiciones largas y cortas con un enfoque de retorno absoluto. Freu explica que, si se cumple el guión y gana un candidato pro europeo, incrementará la asignación a valores enfocados al mercado doméstico europeo. Si se diera la situación contraria, podría esperar mucha volatilidad y que el euro estuviera bajo presión, por lo que invertiría en compañías internacionales con exposición a otras regiones distintas de la eurozona.

Una trayectoria vital

Freu comenzó su carrera profesional como analista del sell side en 1997. En 2005, le surgió la oportunidad de convertirse en gestor y prop trader en operaciones de renta variable long/short para Natixis. Los años siguientes supusieron un gran reto: “El 2006 fue el último año del mercado alcista, en el que era posible predecir el rumbo de la economía. Tan pronto como estalló la crisis de las subprime en verano de 2007, se volvió más difícil invertir. El 2008 fue un año terrible para el mercado de renta variable”, recuerda el gestor. Él consiguió generar retornos positivos durante ese trienio, y en 2009 DNCA lo fichó como gestor.

Ha volcado todos los conocimientos y experiencias adquiridos en estos 20 años en la gestión del fondo. Uno de los rasgos que distinguen al DNCA Invest Miuri de otros competidores es su filosofía conservadora. Esto tiene una razón de ser: “A lo largo de mi formación como gestor he recibido mucha presión para preservar el capital”.

El gestor muestra asimismo un alto grado de compromiso: “Pongo mi dinero en mi fondo. También han invertido mis padres, mi hermano, el fundador de DNCA… por eso es importante la preservación del capital”. Después de proteger el principal, el segundo objetivo es generar una rentabilidad superior a la de los activos libres de riesgo (entre un 4% y un 5%), con un perfil de baja volatilidad.

Freu sólo vuelca en la cartera sus ideas de más alta convicción, aunque vaya a la contra del mercado: “Me di cuenta de que una gran parte de la industria estaba haciendo lo mismo. Yo no voy en esa línea. Yo sólo sigo mis convicciones más fuertes”.

Esas convicciones descansan sobre tres pilares: invertir en compañías que conozca muy bien, seguir únicamente el modelo propietario y poner a la valoración en el centro del proceso. Para seleccionar compañías, el gestor se fija sobre todo en los flujos de caja, aunque también en otras ratios fundamentales como el PER. “Vinculamos todas las ratios y comparamos el potencial de crecimiento de la compañía con su valoración actual”, resume.

Por ejemplo, el gestor prefiere no estar expuesto directamente a la temática de la reflación, que ve como una apuesta top down. Prefiere mantener una exposición equilibrada que refleje otras temáticas: “Me gustan telecomunicaciones y medios de comunicación, porque pienso que la digitalización tendrá un impacto positivo sobre este tipo de compañías. Pero estos sectores son domésticos, por lo que, si se produce un gran problema político, sufrirán. Así que he optado por reducir un poco la exposición de los valores que mejor se han comportado en los últimos meses y cubrir la posición con utilites”, explica.

Ligeramente optimista

La exposición neta del fondo se mueve en un rango entre el -20% y el 30%. Actualmente es ligeramente positiva, del 8,5%, al observar indicios de momento económico en Europa: “Cuando te reúnes con las compañías, lo que comunican en general es que la situación económica global está mejorando”, indica Freu. Otro factor que ve favorable para el entorno empresarial y de beneficios corporativos es el hecho de que “la elección de Donald Trump ha planteado que quizá ya haya pasado la era de la austeridad en el mundo occidental, y que vayamos a ver más estímulos, fiscales y presupuestarios”. Sin embargo, de confirmarse este escenario, implicaría la continuación de las subidas de tipos, “y el incremento de los tipos tiene un impacto negativo sobre la valoración”.

En resumen, “esperaríamos ciertamente un mayor crecimiento del BPA, lo que es favorable para las empresas y los stock pickers como nosotros, pero tenemos que ser cuidadosos”.  Así, dentro de la parte corta de la cartera está cauto con los valores que se han comportado como bond proxies, en sectores como consumo básico o ventas minoristas: “Hemos tenido compañías que en los últimos años no habían crecido pero su valoración sí había estado al alza, y pensamos que en los próximos meses va a producirse una reversión de esa tendencia: mejorarán los beneficios, pero la valoración estará bajo presión”, concluye.