Cómo afecta la prohibición de las posiciones cortas a los ETF inversos

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Ing Jorge. Filckr. Creative Commons

La prohibición que desde ayer se ha impuesto a las posiciones cortas sobre los valores españoles no se aplica, según ha establecido la CNMV, a las operaciones que sean realizadas por entidades que desarrollen funciones de creación de mercado y, por tanto, las gestoras de ETF inversos no se ven afectadas por esta restricción.

En la Bolsa de Madrid, cotizan actualmente sólo dos ETF inversos, ambos de Lyxor, el Lyxor ETF Ibex 35 Inverso y el Lyxor ETF Ibex 35 Doble Inverso Diario, y, según han confirmado a Funds People desde la entidad, continuarán cotizando el producto como hasta ahora. Según la normativa, es responsabilidad del propio inversor que compre el ETF determinar si su posición neta al adquirirlo será corta o no, pero no depende del emisor del producto.

Esta situación ya ocurrió el año pasado cuando se prohibieron las posiciones en corto sobre valores financieros españoles. Entonces, Lyxor continuó cotizando sus productos sin problema, al ser creador de mercado.

Según datos de VDOS, el Lyxor Ibex 35 Inverso cuenta con 80 millones de euros de activos y a un año sube un 18,7%. Por su parte, el Lyxor Ibex 35 Doble Inverso Diario, que la entidad sacó a cotizar a Bolsa a finales del año pasado, registra una subida a seis meses del 34%.

Los ETF inversos han sido, junto con los apalancados, una de las principales novedades de la industria de los ETF durante los últimos años. Se han convertido en una alternativa a los instrumentos tradicionales de inversión a corto, como la venta de activos en préstamo o los derivados (opciones y futuros). Aunque existen diferencias (tanto en el nivel de apalancamiento como en el grado de exposición a pérdidas), el resultado que se obtiene en todos los casos es el mismo: el retorno obtenido es inverso al del activo o índice de referencia escogido.

¿Cómo funciona un ETF inverso?

Los ETF inversos tienen como objetivo replicar el comportamiento de un índice. Como su propio nombre indica, su principal característica es que la exposición a dicho índice es inversa (generalmente en la proporción de -1x aunque existen también fondos inversos apalancados con exposición -2x o -3x). Por lo tanto, en el caso de un ETF inverso -1x sobre el EuroStoxx 50, si el índice sube/baja un 1%, el fondo baja/sube un 1%. Para obtener dicho resultado, el ETF debe recurrir a instrumentos derivados.

Como en el caso de los ETF apalancados, el objetivo de rentabilidad sólo se cumple diariamente, descontados los gastos y las comisiones. Es decir, para periodos de inversión superiores a un día, la exposición real del ETF inverso al índice puede ser superior o inferior a -1x. Ello es debido al efecto de los rendimientos compuestos.

En general, la diferencia entre el rendimiento inverso teórico y el realmente obtenido depende de la volatilidad del índice subyacente (a mayor volatilidad, mayor es la diferencia), el periodo de inversión (a periodos más largos mayores diferencias) y el nivel de apalancamiento (la diferencia será mayor para ETF inversos con apalancamiento).