Brexit: ¿qué pueden esperar los inversores de la bolsa británica en las semanas previas a las elecciones?

Theresa May
The Prime Ministers Office, Flickr, Creative Commons

Una vez resuelta la incógnita electoral francesa, el siguiente evento político de importancia en el calendario europeo son las próximas elecciones generales en Reino Unido, convocadas para el 8 de junio. De momento, las elecciones locales celebradas el pasado 4 de mayo han actuado como un aperitivo de lo que puedan esperar los inversores en junio, al desplomarse el número de votos a favor de los laboristas y del UKIP a favor de los tories. “La historia sugiere que las campañas para elecciones generales que exponen casos claros tienden a tener un efecto positivo sobre la bolsa”, afirman Ben Arnold, autor de contenidos de inversión de Schroders.

La gestora ha realizado un análisis del comportamiento del Ftse 100 en las seis semanas previas a las últimas siete elecciones generales celebradas en el Reino Unido. El principal descubrimiento ha sido que el índice subió en tres ocasiones, “en cada una de ellas cuando se vio que el resultado estaba bastante claro”, con independencia del signo político de quien ganara en ese momento: la victoria de los conservadores en 1987, y las victorias laboristas de 1997 y 2001.

En cambio, el análisis refleja que el mercado ha presentado un mal comportamiento cuando la intención de voto era similar para los contendientes. Por ejemplo, el Ftse 100 cayó más del 8% en las seis semanas previas a la elección de 2010, que se saldó con un gobierno de coalición entre el Partido Conservador y el Liberal Demócrata.

James Rainbow, co responsable del negocio de intermediación de Schroders para Reino Unido, comenta sobre estas evidencias que “tiene sentido que los mercados se porten bien durante los momentos de estabilidad política”. Matiza no obstante que, “aunque sea útil saber que este comportamiento se ha repetido en la carrera hacia las elecciones en los últimos 30 años, no hay garantías de que sea el caso para estas elecciones”.

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¿Qué esperar?

Según Arnold, las primeras encuestas muestran una intención de voto de entre el 42 y el 44% a favor de los tories. A pesar de esta ventaja, se pregunta si volverá a repetirse la historia. Para comprender mejor sus dudas, el experto recuerda que el anuncio sorpresa de elecciones por parte de la Primera Ministra, Theresa May, provocó que la libra registrase máximos de seis meses y, en consecuencia, el Ftse 100 registró su mayor caída precisamente desde el voto al Brexit, “demostrando otra vez lo influyente que es la fortaleza de la divisa”.

Otra de las conclusiones del análisis es que, durante estas semanas previas a la cita con la urna, muchos inversores optaron por traspasar su dinero a activos distintos de la renta fija, como el efectivo o los bonos. Esta práctica se lleva una objeción del experto: “Los inversores de largo plazo en renta variable deberían estar más que acostumbrados a la idea de que habrá periodos que sean un poco inestables, especialmente en torno a grandes eventos políticos”. En este caso, su consejo es “recordar cuáles eran tus razones iniciales para invertir, y ceñirte al plan”.

El representante de Schroders comenta asimismo que los valores que constituyen actualmente el Ftse 100 “son mucho más internacionales hoy de lo que eran en elecciones previas”.  Es decir, que los inversores deberán prever un comportamiento del índice muy condicionado por la divisa en las próximas semanas, pues el fortalecimiento o la depreciación de la libra tendrá impacto directo sobre las acciones del indicador.

El experto también tiene un último consejo para aquellos que quieran hacer apuestas basándose en los sondeos electorales: “Aquellos inversores que quieran especular con los resultados de los sondeos deberían tomar nota de los resultados sorpresa anteriores. La elección de 2015 ofrece una advertencia. Las encuestas indicaban que sería la elección más ajustada de la historia, con un parlamento bloqueado. Los mercados terminaron las seis semanas previas a la elección sólo con ligeras pérdidas. Las encuestas demostraron estar completamente equivocadas, porque los conservadores obtuvieron una amplia mayoría”.