Bonus, riesgos y profesionales incompetentes

Dentro del sector financiero y de la sociedad en general se ha establecido un supuesto que ha quedado fijado en el subconsciente: Profesionales incompetentes han asumido riesgos innecesarios para cobrar bonos millonarios. Por consiguiente la culpa de la situación no es nuestra, es de “esos” profesionales incompetenetes que han estropeado la mayor fase de expansión económica tras la 2ªGM. Y ésta es, probablemente, la falacia más extendida a través de muchos medios de comunicación.

Aunque en referencia a los bonus es muy difícil manejar información objetiva, pues en muchos casos son confidenciales, lo cierto es que el uso de incentivos busca condicionar el comportamiento de los sujetos y puede terminar generando situaciones indeseadas. Un ejemplo cercano en la industria de fondos son los incentivos a la distribución. ¿Qué fondos distribuir?, ¿los mejores del sector aunque sean de la competencia o aquellos que más comisiones dejan al distribuidor? No obstante, en relación a los otros dos temas siempre he tenido grandes dudas, por no decir una radical oposición a dicha hipótesis.

En los 20 años que llevo en el sector y la experiencia de haber trabado en varios países, jamás he tenido ocasión de conocer una entidad cuya forma de valoración de los riesgos o la capacidad técnica de sus profesionales sea totalmente inadecuado o excesivamente peligrosa. Ésto no quiere decir que no se hayan cometido errores o utilizado supuestos excesivamente favorables (Nothern Rockes un buen ejemplo en el Reino Unido), pero no es menos cierto que ésta crisis ha pillado a casi todos fuera de juego, ha alcanzado niveles extremos y ha sucedido un evento que raramente sucede cada 100 años.

Al final, todas las entidades financieras tienen que maximizar 3 restricciones: solvencia, liquidez y rentabilidad; para acto seguido dar ciertas probabilidades a diferentes escenarios que puedan suceder y esos es lo que finalmente han hecho.¿Quién podía imaginar el caso de Lehman o de Fanie Mae? Quizás ahora parezca evidente pero hace 2 años era sólo una hipótesis poco creíble.

Sin embargo, si algo ha fallado estrepitosamente ha sido el papel de los reguladores. Puede que Nothern Rock estuviera asumiendo un riesgo considerable financiándose sólo en el interbancario pero ¿cuántos años llevaba haciéndolo y que opinaba la FSA? Quizás, una de las lecciones de la actual crisis no es tanto los bonus, los riesgos o la falta de profesionales competentes sino la necesidad de dotar al sistema financiero de un sistema de gobierno y supervisión del siglo XXI, en vez del que actualmente tenemos.