AXA IM pronostica una rebaja del rating de España a grado especulativo en los próximos seis meses

00fail
Robert Hruzek, Fickr, Creative Commons

La probabilidad de que las agencias de rating rebajen la nota de España a grado especulativo en los próximos seis meses alcanza el 60%, hecho que tendría consecuencias de gran alcance para la economía española, ya que, si así fuera, implicaría una salida forzosa del país de la categoría de grado de inversión, según pronostica AXA Investment Managers. Así lo asegura la entidad en un informe de Investment Spotlight en el que se pregunta si España cruzará esta frontera. En su opinión, “las expectativas para los 18 próximos meses son ligeramente más pesimistas que las de Moody’s y mucho más bajas que las de S&P. Esperamos que las agencias de rating revisen sus supuestos por la caída del crecimiento económico en el país”.

La gestora francesa anticipa un descenso del 1,7% del PIB para este año y una contracción para el que viene del 2,7%, debido a la caída del consumo y la inversión privada y al menor gasto público. No obstante, este descenso iría seguido por una lenta recuperación y un crecimiento a largo plazo del 1,8% (en línea con las estimaciones del FMI). Además, calcula un déficit primario (excluyendo los intereses de la deuda) del 3,5% del PIB en 2012, del 2% en 2013 y del 0,5% para 2015. Finalmente, AXA IM prevé que la tasa de interés pagado en el mercado de deuda se vuelve más estable, alrededor del 3,9%.

El pesimismo generado en torno a la situación económica-financiera española viene propiciado por algunas de las recientes medidas y noticias conocidas, como el requerimiento de ayuda financiera por parte de Cataluña y Comunidad Valenciana (algo que no era esperado ni por el Gobierno ni por las agencias de rating), la próxima subida del IVA preparada para septiembre o el alto índice de desempleo (actualmente en el 24,4%). Por el contrario, y como nota positiva, la caída de la demanda interna hará que la contribución de las exportaciones al crecimiento del PIB sea mayor.

En realidad, “España es de facto un país monitorizado y el balance de riesgos nos hace pensar que la hipótesis de que necesite más ayuda es más probable que un escenario en el que no lo haga”. AXA IM cree que solamente dos actores externos al país serían capaces de mejorar sus pronósticos. Por un lado, Alemania, que podría adoptar una postura más flexible de ayuda a sus socios comunitarios y, muy particularmente, en su avance hacia la unión bancaria europea, lo que tranquilizaría a los mercados y a las agencias de rating. Por otro, el BCE, que reactivaría su programa de compra de bonos, demostrando así que, tal y como anunció ayer mismo su presidente, Mario Draghi, hará todo lo que está en su mano para salvar al euro.