Agosto, ¿Quién dijo vacaciones?

 Tradicionalmente en agosto en nuestro país han cerrado un gran número de empresas por vacaciones. También es el mes durante el cual las familias disfrutan de unos merecidos días de retiro en la playa o la montaña.  En los mercados financieros, sin embargo, agosto es un mes con altas probabilidades de elevada volatilidad e incertidumbre.  

 

En el actual agosto son las dudas sobre el crecimiento de la economía, y en especial de la economía de Estados Unidos, y los problemas de la eurozona, los que han provocado abultadas caídas en los mercados de renta variable.  Hace cuatro años, en agosto de 2007, la crisis subprime nos daba el primero de los grandes sustos. ¿Quién no se acuerda de las caídas de los monetarios dinámicos de aquellos días? Muchos recordarán algunos fondos que llegaron a suspender el cálculo de su valor liquidativo. 

 

También fueron memorables las fuertes caídas de la renta variable en agosto de 2001, agosto de 1998 y agosto de 1997. En 1998 quebró el afamado hedge fund LTCM, y en 1997 la crisis asiática estaba en su máximo apogeo. En 2001 la burbuja tecnológica estaba estallando. 

 

Es obvio que en agosto (e incluso en septiembre) son meses en los que históricamente se han dado un gran número de episodios dramáticos en los mercados financieros. Sin duda, la falta de liquidez durante este periodo puede ayudar a que la volatilidad se incremente. No obstante, no hay que olvidar que todos los inversores tienen en sus decisiones un alto componente de psicología (es lo que estudia el behavioural finance). En este sentido durante los meses de calor las personas pueden estar más irascibles o tener comportamientos más “agresivos”. Es conocido el hecho de que la mayor parte de las guerras comienzan en el periodo estival, aunque este hecho no puede ser achacado exclusivamente al cambio del comportamiento en la psicología de las personas debido al calor (algunas guerras empiezan en verano por motivos estratégicos), es evidente que agosto tiene un imán especial para generar incertidumbre.

 

Rafael Hurtado Coll, CIO de Popular Gestión