A puertas del año 2012, el futuro de la economía global aun es incierto….

Tal como lo anuncio el Fondo Monetario Internacional “la economía global se encuentra en una peligrosa nueva fase. La actividad global se ha debilitado y transformado en más desigual, la confianza ha caído recientemente y los riesgos de un deterioro aumentan” y añadía que la única manera de esperar una recuperación más fuerte es si los Gobiernos actuaban de manera más decisiva sobre su política fiscal, el sector financiero y la balanza de pagos.

Tal como lo ha demostrado China recientemente, a pesar de las reducciones en el crecimiento que ha previsto el FMI para años venideros, vemos que los países emergentes a pesar de sus altos niveles de inflación tienen mejores proyecciones de crecimiento vs los países desarrollados, por la solidez de sus datos macroeconómicos y la eficiente gestión que llevan estos países.

China como mencionaba, ha dado muestras de una excelente capacidad de gestión, pese a sus problemas inflacionarios y de mercado inmobiliario que presenta, reporto para este tercer trimestre un crecimiento del 9.1%.

Las medidas adoptadas desde diciembre del 2009 para frenar al sector inmobiliario han tenido efecto: el volumen de transacciones es la mitad que en el 2009, los indicadores de precios parecen que van a caer en breve y han aumentado considerablemente el ratio de inventario-ventas en las principales ciudades.

El sector inmobiliario representa un 27% de la inversión en capital, que a su vez es un 47% del PIB chino, de ahí la importancia del sector y el riesgo que supone una crisis como la sufrida en Europa o Estados Unidos. Como contrapunto, los programas de vivienda pública siguen a pleno rendimiento, con 10 millones de viviendas en construcción a septiembre de este año.

Y si a esto le sumamos la reciente medida tomada por las autoridades chinas de reducir en 50pb a los tipos exigidos a las reservas bancarias para impulsar el crédito ante los riesgos de un enfriamiento excesivo de la economía han hecho que esta economía continúe presentado señales de recuperación y se situé hoy como uno de los motores principales para impulsar a la economía global hacia una recuperación. Recuperación que solo será viable con una acción concertada y decida por parte de las autoridades monetarias y de los jefes de gobierno.