A&G, una apuesta por la selección cualitativa en los fondos de inversión

Kamil Molendys, Unsplash

Diego Fernández trabaja en la selección de fondos de inversión desde hace ocho años y actualmente dirige el equipo de análisis y selección de la entidad de banca privada A&G, compuesto por tres profesionales. Asegura que la crisis no ha provado grandes cambios en su proceso de selección, muy basado en la parte cualitativa, si bien reconoce que actualmente se es más "cautos en cuanto a riesgos operacionales, de contrapartida y demás riesgos". "Parte importante del proceso de selección es el seguimiento y aunque siempre nos hemos asegurado de invertir sólo en lo que conocemos, quizás ahora somos más exigentes en eso incluso en el corto plazo. No todos los gestores pueden hacerlo bien todas las semanas, pero en cuanto su rentabilidad nos llame la atención (por positiva o negativa), venderemos si no hay una explicación convincente", explica.

La caracterísitica principal en el proceso de selección que llevan a cabo en A&G es, en opinión de su director, el alto peso que dan al análisis cualitativo de los productos. "Nuestro proceso en más cualitativo y consecuencia de eso, nuestro juicio sobre un gestor es menos “volátil” que el de la media. Pensamos que el alfa no es una variable constante en el tiempo y por eso, siempre que se explique bien el underperfornce, solemos dar oportunidades a los gestores que decepcionan en sus rentabilidades", dice.

Sobre su proceso, Fernández explica que intentan abstraerse de los resultados cuantitativos de los fondos casi hasta la última fase del análisis. "Sólo entonces, nos asegurarnos de que la historia encaja con los números. Alguna vez hay sorpresas con gestores que tienen un resultado excelente en la parte cualitativa y cuya rentabilidad resulta decepcionante, pero es poco frecuente. El objetivo principal del proceso es ser capaces de comprender cuáles son los entornos de mercado favorables y desfavorables para cada gestor", dice.

En A&G trabajan con un modelo de arquitectura absolutamente abierta, siendo el regulatorio en único límite que imponen a sus clientes. En su búsqueda por los mejores gestores en cada clase de activo incluyen fondos tanto nacionales como internacionales, si bien, en términos de activos, el porcentaje invertido en gestoras internacionales es mucho mayor. En total, en A&G cuentan con un patrimonio asesorado en fondos de inversión de 1.000 millones de euros.

En su relación con las gestoras, se centran en buscar los mejores productos y también valoran la transparencia y accesibilidad, para asegurarse de que siempre conocen qué tiene en cartera. "El apoyo comercial y consejos más allá de su gestión, siempre son bienvenidos, pero no son el factor que nos hace elegir uno u otro gestor. Exigimos al gestor que haga bien su trabajo y nosotros hacemos el nuestro. Él valorará ayuda de sus brokers igual que nosotros de nuestros proveedores, pero eso es sólo un complemento", dice Ferández.

En su proceso valoran especialmente conocer personalmente a los gestores y más aún, conocer los procesos de inversión. "Los fondos los gestionan personas y conocer a la persona es muy importante, pero en una industria tan profesionalizada, hay que ser capaz de juzgar al gestor como gestor y no como vendedor", dice. "Intentamos evitar juzgar a los gestores por su capacidad de comunicar y tener claro lo que buscamos de ellos y las aptitudes que necesitan para poder cumplir con su mandato".

Para Fernández y su equipo también es importante mantener una estrecha relación con los equipos de venta de las gestoras puesto que son ellos son quienes muestran el producto al menos en la primera fase del análisis y sobre todo, los que facilitan el seguimiento. No vetan a gestoras con las que trabajar pero Fernández reconoce que, llegado el caso, se harúa puesto que "hay demasiadas gestoras como para aceptar fallos operativos y de valoración o informaciones contradictorias".