2011, el año en el que el mercado dio la razón a Carmignac

2011 será recordado en la gestora francesa Carmignac como el año en el que el mercado le dio la razón pero en el que los frutos de acertar con la lectura de la situación fueron “frustrantes”. El año que acaba de terminar ha sido un ejercicio en dos mitades para la entidad: unos primeros meses en los que mantuvieron posiciones muy defensivas por su negativa visión sobre la situación económica, meses en los que los mercados no coincidían con esa posición y, por tanto, sus productos sufrieron, quedándose atrás frente a sus competidores. A partir de verano, la situación cambió. Los inversores fueron conscientes de que la solución a la crisis se iba a alargar más de lo que descontaban y el negativismo inundó los mercados. En Carmignac ya estaban posicionados para ese escenario, por lo que las fuertes caídas del verano y del último trimestre del año no les pasaron factura como a otros.

 

“En los primeros meses del año, los clientes estaban decepcionados porque pensaban que éramos demasiado conservadores y nos llamaban gallinas; todo el mundo decía que era buen momento para invertir, pero nosotros seguíamos muy negativos y a los clientes no les gusta eso”, explica Didier Saint-Georges, miembro del Comité de Inversión de Carmignac. En agosto las cosas se dieron la vuelta precisamente por lo que ellos habían estado diciendo. “El problema es que cuando aciertas porque estás posicionado negativamente es una pena porque aunque lo hagas mejor que los competidores el mercado no te permite ganar rentabilidad para tus clientes, es un poco frustrante”, dice Saint-Georges.

 

Así las cosas, han conseguido salvar el año en términos de rentabilidad. El Carmignac Patrimoine, por ejemplo, cerró 2011 con una bajada del 0,7%. “La mayor satisfacción es que todos los fondos de la gama Patrimoine han cumplido su objetivo, que es el preservar capital; los de renta fija se han comportado como se esperaba de ellos y los de bolsa lo han hecho mejor que los competidores”, dicen desde la entidad.

 

En términos de patrimonio, el año no ha sido bueno porque se han registrado salidas de dinero en la primera parte del año y en la segunda no se vio una reversión, ya que con los inversores prefirieron buscar rentabilidad en otros productos y se alejaron de los fondos de inversión. Así, en total, la gestora cuenta actualmente con un patrimonio de 45.000 millones de euros, un 18% menos que un año antes. En la gestora, no obstante, confían en volver a ver suscripciones netas en sus productos en 2012, una vez los clientes hayan vuelto a comprobar que en 2011 han sido capaces de cumplir con su objetivo principal: proteger el capital y generar alfa.

 

De cara al nuevo año, en la gestora mantienen sus posiciones defensivas porque siguen siendo muy negativos con el mercado, creen que la solución a los problemas de la deuda soberana todavía no ha llegado y “No porque acabe un año y cambie el calendario vamos a cambiar. Nosotros intentamos hacer suposiciones objetivas y mantenemos nuestra posición de preocupación”, explica Saint-Georges. “2012 va a ser un año difícil, pero más que intentar adivinar qué pasará, preferimos prepararnos y posicionar nuestras carteras para afrontar cualquier escenario”.